viernes, 6 de noviembre de 2015

Casas de niños

Hola a tod@s! Llevo tiempo sin escribir ninguna entrada y es que estoy pasando por una etapa de sequía blogueril. Para ser sinceros, no me apetece nada de nada ponerme a escribir cuando tengo un rato libre. Pero hoy voy a romper esta rutina para contaros algunas cosillas.

A pesar de no gustarme mucho la idea de que los niños vayan desde tan chiquitines a la guardería, bollito ha empezado este curso a asistir a una Casa de Niños, escuelas infantiles de la Comunidad de Madrid (no sé si en el resto de comunidades se llaman igual...) en horario de 9 a 13. Tomamos esta decisión porque, lamentablemente, es la única forma de que bollito tenga contacto con otros niños, ya que en nuestro entorno o son niños grandes o directamente no hay niños, así que hubo que pasar por el aro.

Pasamos un periodo de adaptación corto pero intenso. Ella se quedaba bien (lloriqueaba un poco, pero nada importante) con la profe y me guardaba lo mejor para mí. Estuvo muy enfadada conmigo, se enrabietaba por cualquier cosita y cuando digo cualquier cosa es eso, cualquier cosa (si le hablaba, si le miraba, si intentaba jugar...), hasta me pegaba. Se sentía muy dolida por quedarse allí, aunque allí se lo pasara bomba, pero yo no estaba...

Yo lo pasé muy mal esos días, estuve a punto de no llevarla más. Yo no trabajo, estoy en casa todo el día, ¿qué necesidad tenía de pasarlo mal? Le di la oportunidad a otro lunes, era la segunda semana y cual fue mi sorpresa, ¡entró ella solita! ¡y al recogerla no lloró! ¡y las rabietas disminuyeron en cantidad e intensidad! Y han ido pasando los días, las semanas y bollito cuando entra por la puerta me pide el besito, se va a su cojín y me lanza besos desde allí. Mi niña disfruta yendo y a mí eso me encanta.

Lo único que sigue haciendo desde el principio es pedirme la tetita según la cojo a upa y ¡ay como se lo niegue! Así que tooodos los días, nada más llegar a casa, toca ración de teta y mimos para compensar esas horas de separación.

Siento que mi niña se me hace mayor, ha cambiado tanto en tan poco tiempo... Ya casi no veo nada de bebé en ella, hasta en las noches ha cambiado, pero eso lo dejo para otra entrada, que ha sido un paso enorme para todos y merece mención especial.